Páginas

miércoles, 1 de diciembre de 2010

“ Mirando con mis ojos de niña el patio de la casa de mis padres, veo un lugar inmenso y mágico”
El Patio estaba en la parte de atrás de la casa y conectaba con el taller, estaba rodeado de jardineras con flores y plantas ornaméntales, en el centro había una mata de aguacates que estaba rodeada por una mesa redonda. Había columpios, montaña de deslizarse, bicicletas, mangueras, pelotas y muchas cosas mas.
En el patio hacíamos la tarea, comíamos la merienda, jugábamos, algunas veces teníamos baños de manguera, corríamos para ocultarnos cuando hacíamos alguna travesura. La mesa redonda era una maravilla para correr sin que te puedan agarrar.
En las noches el patio quedaba en penumbras, se formaban sombras y todo parecía mas mágico.
Yo era una niña de pelo largo, ojos grandes y negros, que adoraba correr de un lugar a otro, el patio era mi lugar favorito de toda la casa. En ese patio de mi infancia se crearon muchos de mis sueños, se celebraron muchos de nuestros logros familiares y de nuestras alegrías. También lloramos y sentimos tristeza.
Conforme fuimos creciendo seguimos viviendo en el patio, solo que no nos dábamos cuenta. Como no lo sabíamos recuerdo que el patio dejo de ser hermoso, ya no lo cuidábamos tanto como antes, pareciera que dejamos de amarlo a pesar de todo lo que representaba para nosotros.
Hoy he regresado a ese lugar mágico que veía con mis ojos de niña. Llena de gratitud por todo lo que me brindo, me inclino con amor y reverencia.
Hoy es un día diferente, una invitación para recordar los lugares que llenan de magia tu vida, míralos, recréalos y disfrútalos. Agradéceles con amor y reverencia, nada es casualidad, todo esta sincronizado.

No hay comentarios.: