Desde el 1 de enero de 2010, el orden divino me ha regalado la gracia de compartir con ustedes cada día una reflexión sobre temas muchas veces sugeridos por las experiencias de la vida, pero principalmente por temas que surge de manera espontánea al momento que me siento a escribir.
Cada día de estos 365 días del 2010 que ha aun esta transcurriendo ha sido realmente diferente para mi. No tengo palabras para agradecer el regalo de escribir, para agradecer el regalo de que muchas personas se animen a leer, para agradecer los testimonios que he recibido de muchas personas que han encontrado en un día diferente un mensaje que contribuye a que su día se transforme y sea mejor en medio de los retos de la vida.
La puerta que se abrió para mi al recibir este regalo, es una preciosa puerta blanca que me conecta cada vez que escribo con toda la divinidad. Es dejar a Dios ser Dios y simplemente ocuparme de ser un canal de luz a su servicio.
Hoy es un día diferente para agradecer un compartir estas gracias recibidas y todas las bendiciones que cada día llegan a ti. Deja a Dios ser Dios, mientras tu te ocupas de todos los asuntos que transmiten amor, es así como serás cada vez mas un canal de luz limpio y transparente que fluye.
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