Calendario 2011 “Un día diferente”

Compartir lo que recibimos nos abre la puerta para seguir recibiendo y mantiene activo el flujo natural de la vida. Cada vez que contribuimos a que el flujo natural de la vida continúe manifestándose estamos apoyando la sanación de nosotros mismos, del planeta y de la vida en general.

El mundo de las ideas no es distinto al mundo de la materia, nuestra mente y nuestro corazón se pueden llenar de desperdicios sino estamos atentos para limpiarlos, se pueden llenar de materiales que no son biodegradables que se pueden quedar estancados por siglos dañando nuestros sistema e impidiendo en flujo natural de la vida en nosotros.

Para mi un día diferente, es el espacio de limpiar mis ideas y mis sentimientos, colocando en mi mente y en mi corazón mensajes, historias, reflexiones nuevas, mas sanas, mas refrescantes, de materiales biodegradables que contribuyen a que el flujo de mi vida sea cada vez mas fluido y en armonía con todo mi entorno.

Las ideas nuevas que han surgido a partir de este nuevo cuidado que tengo con mi mente y mi corazón son muchas, el amor que hoy siento y puedo manifestar por mi misma y por los demás es mucho y al mismo tiempo esta libre del apego de otros tiempos.

Hoy siento que cada reflexión a dado paso a una nueva versión de mi misma, al tiempo que me conecta con todos aquellos que desean lo mismo y que a su manera y su tiempo están en el camino de su propio proceso.

Hoy siento que con toda la reverencia y la gratitud de una hija he recibido las monedas que me entregaron mis Padres y con ellas estoy haciendo todo lo mejor en cada momento de mi vida.

El calendario 2011 “un día diferente” es parte de los frutos que he decido cosechar con las monedas que recibí de mis padres, espero que cada uno de ustedes haga lo propio con las monedas que han recibido.

Hoy es un día diferente, una invitación para recibir con reverencia, gratitud y amor las monedas que nos entregan nuestros Padres, solo con esas monedas somos capaces de construir la mejor versión de nosotros. Rechazarlas es rechazar la vida.