La vida transcurre entre momentos de risas y llantos. Sin importar las circunstancias de la vida en algún momento disfrutaremos de las risas y en otros aunque lo intentemos evadir llegara en llanto.
Los motivos para reír o para llorar siempre esta ahí, solo que no siempre nuestro corazón esta listo para percibirlos.
Los momentos de risas nos alegran, nos reconfortan, los momentos de llanto nos afligen y al mismo tiempo nos liberan.
El día puede ser soleado o lluvioso, de frío o de calor, el día en si mismo no tiene interpretación, la interpretación se filtra a través de nuestros momentos de una u otra sensación, la de risa o la de llantos.
Aceptar la vida y fluir en cada uno de esos momentos nos brinda la posibilidad de vivir con mayor amor y gratitud. Aprendiendo así a dejar ser y hacer a cada ser humano aquello que le corresponde.
Hoy es un día diferente para reconocer tus momentos de risas y tus momentos de llantos, darle su lugar a cada uno y fluir con amor y gratitud.
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