Una luz en el camino

Cualquier camino que tomes te puede llevar al lugar que necesitas llegar, la diferencia no es la decisión, la diferencia la determinaran las experiencias que necesites vivir para llegar.

A veces estamos muy cerca en términos físicos de aquello que deseamos alcanzar, sin embargo, en términos espirituales estamos tan lejos, que es preciso recorrer un largo camino para un logro que pareciera era posible alcanzarlo con tan solo unos cuantos pasos.

Cuando el camino se presente ante ti. Antes de juzgarlo, bendícelo, acéptalo y es entonces que tu mente libre de prejuicios podrá conectar con tu corazón e identificar si ese es el camino que te corresponde seguir.

Todos los caminos tienen sobras y luces, momentos de disfrute y momentos de retos, el punto de clave en realidad nada tiene que ver con estos aspectos, aunque sea en ellos que gastamos toda la energía disponible para el viaje. La esencia de cada recorrido radica en identificar con claridad que es este el camino que nos corresponde recorrer, una vez en el aceptar cada paso tal como es.

Es la claridad y el estado de alerta de nuestra mente y nuestro corazón, trabajando juntos y a nuestro favor , la verdadera clave para saber cuando detenernos y cuando continuar. Las experiencias que elegí para vivir y para aprender en muchas oportunidades resultan retadoras. En especial porque muchas fueron decididas desde el ego, la arrogancia, la soberbia, la avaricia o la envidia.

Algunas veces la decisión la tomamos desde una postura de victima, de mártir, de niño, de heroe, de mendigo o quien sabe que postura hemos decidido adoptar en ese momento. Esas distorsiones nos llevan a decidir algunas veces experiencias dramáticas, que implican grandes sacrificios, actos de inmadurez o simplemente que nos llevan a las carencias. Otras veces pueden ser maravillosos compañeros para elegir lo que nuestra alma necesita aunque las apariencias nos hagan dudar.

Hoy es un día diferente, para que a medida que avanzas por el camino identifiques la luz y te identifiques con ella. La luz ilumina la oscuridad, mas no la maltrata, simplemente con suavidad le regala sus rayos. Cada paso que das es parte del plan divino, hazlo con consciencia, con reverencia y gratitud.