Escucha, Escucha, Escucha.

A tu alrededor los pájaros cantan al amanecer, Alguna vez has descifrado el mensaje que trae su sonido?

La naturaleza te regala cada dia sus melodías, en diferentes tonalidades, matices y sentidos. Las gotas de lluvia que caen, el viento que mueve las hojas del árbol, las olas del mar que vienen y van, todo es música, todo es ritmo, o quizás todo es ruido.

El repique de los tambores, el llanto de un niño, el timbre que suena en la puerta, el celular que suena, a veces es música, otras veces es ruido. El llamado de la vida, el recuerdo del olvido.

Las palabras que fueron dichas, las que se ahogaron en un suspiro, Los poemas, las cuartillas, las décimas, las salves, todo es música, todo es ruido.

Las bocinas del cuerpo colocados en cada lado, listas para captar toda la música, todo el ruido. Amplifican hacia dentro, se proyecta hasta el olvido.

Sino escuchas la música que suena, entonces escuchas el ruido. Empieza por revisar Tu frecuencia, continua limpiando tus oídos. Las palabras llenas de odio, de soberbia, de envidia dichas con descuido ensucian los oídos, es por eso que tanta gente solo escucha el ruido.

Para escuchar la música, necesitas tener limpios tus oídos, dispuesta el alma, estar abierta a los suspiros. La voz que esta muy dentro, mas allá de tus cinco sentidos, constantemente te habla, es tu música, aunque a veces te parece ruido.

Prepara tus bocinas, empieza a emitir buenos sonidos, entrena tu escucha para que aprendas a deleitarte con la música y a diferenciarla del ruido.

Hoy es un dia diferente, abre atento tus oídos, empieza a escuchar tu música, armoniza tus sentidos, tus palabras son canciones, limpia el alma, relaja tus sentidos, en la danza de la vida todo es música, nada es ruido.