El precio de la Indiferencia

Cuando cerramos los ojos para no ver, cuando cerramos los oídos para no escuchar simultáneamente cerramos el corazón para no sentir. Nos amparamos en tantas buenas excusas para transitar con indiferencia ante lo que no nos gusta, ante lo que nos parece complicado, o simplemente ante aquellas cosas que entendemos tan fuertes que nos creemos impotentes para cambiarlas.

Acogernos a la indiferencia es una opción, y al ejercerla la convertimos en una decisión. Es importante que por unos minutos reflexionemos hacia lo mas profundo de nuestro corazón y comprendamos que todos tenemos el poder para cambiar y contribuir a la transformación de muchas de las cosas que ocurren en nuestro entorno. La diferencia esta en entender que para movernos hacia un cambio, el preciso trabajar como equipo, asumiendo cada uno la “pequeña” parte que nos toca.

Cuanta veces he dejado de decir lo que pienso, porque son tan solo mis palabras, cuantas veces he dejado de tender la mano a quien la necesita, porque son tan solo mis manos, cuantas veces, he seguido el camino o he mirado hacia otro lado, porque a penas tengo mi mirada y un positivo pensamiento. Desde que lugar estoy actuando ante la realidad de la vida?

Me creo tan poco, que he dejado de usar mis palabras, mis manos, mi mirada, mis dulces pensamientos porque creo que a penas son migajas ante la abrumadora necesidad de nuestra comunidad, de nuestro país, del mundo.

Hoy es un dia diferente para recordar que cada ser es único, cuando con tus palabras, tus manos, tu mirada o tus dulces pensamientos contribuyes a un solo ser humano, contribuiste al 100% de esa persona. Cada vez que ayudas a alguien, hiciste el 100% de ese instante, si llenas tus instantes de 100% y cada uno de los que conformamos el gran equipo de este planeta hace lo mismo, busca una calculadora para que multipliques el bienestar del mundo.

No importa que parezca que el mundo se este derrumbando, siempre hay un espacio para reconstruir, no sigas buscando grandes respuestas para actuar, ante la indiferencia, simplemente empieza a hacer la diferencia usa tus manos, tu voz, tus ojos, tu corazón, toca la vida de quienes te rodean, toca tu propia vida. Es la mas sencilla de las maneras, es una forma de empezar.

Mira a tu alrededor el precio de la indiferencia esta cobrando vidas. Esta destruyendo a su paso, sueños, esperanzas, esta debilitando nuestra capacidad de amar.

Hoy es un dia diferente, para reconocer a personas especiales que con su trabajo y decisión, contribuyen a disminuir el precio de la Indiferencia. Gracias Tahira Vargas, por mostrarnos lo que necesitamos ver aunque muchos veces no resistamos. Gracias por seguir tu camino, siendo autentica y real.