Páginas

domingo, 3 de abril de 2011

Escrito No. Trece…Un día después

Siguiendo la lógica de mi propio orden, seleccione los sábados como el día de los escritos semanales, la semana pasada fue un verdadero reto lograrlo y esta semana fue imposible. Entonces me detuve y mire a mi alrededor. Me di cuenta que no siempre la lógica de mi propio orden es la respuestas, a veces es más sencillo fluir con las olas que trae la vida, en especial si has pasado mucho tiempo en la orilla pidiendo que la marea suba.
Ahora es más simple, unifico la lógica de mi propio orden, a la lógica del orden divino y permito que cada día me guíe, sin prisas, sin presiones, sin expectativas, sin culpas, asumiendo la responsabilidad de cada paso y disfrutando la plenitud de avanzar con el corazón lleno de alegría y los pies firmes sobre la tierra, avanzando por el camino de mi dirección, mi arraigo, mi sostén y mi equilibrio.
Con este nuevo fluir me gustaría recordarme y recordarles que:
Cada uno de nosotros somos “magníficos” si miramos mas allá de lo aparente y nos miramos y conectamos desde nuestra alma es posible vernos y ver a los demás en todo su esplendor.
Cuando pides…siempre tendrás la oportunidad de recibir, no desistas porque no te gusta el empaque, siempre es recomendable abrir antes de juzgar, mirar más allá de lo aparente es sabiduría. No renuncies, persiste.
Mientras más grande es la prueba…. Más glorioso es el triunfo. Nadie dijo que seria fácil ni difícil, simplemente es. Cuanto más tengas para dar, mas oportunidades tendrás de hacerlo. Si eliges ser un transformador y contribuir al cambio, la revolución empezara en tu propia vida. Solo las victorias personales nos brindar las posibilidades a las victorias colectivas.
Un día después… no es tarde, no es temprano. Tan solo es una nueva oportunidad, es el día que corresponde si así lo establece el fluir y con gusto soy una con este nuevo movimiento.

No hay comentarios.: