Desde el primer momento en este mundo empezamos a recibir mensajes de las personas que nos rodean, pareciera que al nacer debemos pasar por un jurado que valorara y aprobara nuestra presencia en este mundo.
Cuando los niños nacen algunas familias se reúnen y reciben al bebe, en ese momento empiezan a identificar los parecidos y algunos muy discretamente emiten sus comentarios de aprobación o desaprobación según sea el caso. O más bien dependiendo que tanto cumpla o no el nuevo integrante de la familia con sus expectativas. Cada familia tiene una idea de como deben ser "los fulanos" " los menganos" y si al nacer no cumples con esos estándares, cada cierto tiempo alguien te lo recordara.
Los comentarios son el toque mágico a la situación, si el bebe es considerado "feo" empiezan a decir "parece muy simpático" " que ropa más bonita la que le pusieron" " el aclarara con el tiempo" " Todos los bebes nacen así y después se ponen bonitos" en pocas palabras le están diciendo "feo" a su bebe.
Algunas bebes nacen y no son recibidos, ni siquiera tienen el privilegio de ser llamados "feos" dependiendo las circunstancias muchas familias simplemente no los aceptan, porque es hijo de tal o cual o porque no están de acuerdo con las actuaciones de la madre o el padre.
Si tomamos este pequeño hecho de referencia es más difícil pertenecer a tu propia familia, que ingresar a cualquier organización internacional. Es cuestionada tu apariencia, tu origen, los pronósticos de lo que podrías llegar a ser y sobre este base, eres más o menos parte de esa familia.
Muchas personas quedan atrapados en el deseo de pertenecer y todo el tiempo recuerdan el rechazo y buscan maneras más destructivas aún para cambiar esa situación. Lamentablemente el remedio resulta ser peor que la enfermedad en la mayoría de los casos.
Otras personas aprenden a olvidar. Olvidar lo que te dijeron sobre tu apariencia, tus talentos, tus posibilidades de éxito. Olvidar que tienes que ser fiel a esa sentencia de fracaso que otros quieren entregarte porque esa ha sido su verdadera historia, aunque la oculten en lo más profundo de su corazón.
Olvida todos esos mensajes limitantes, todas esas palabras que una vez recibiste con dolor, olvida el temor que otros quisieron instalar en ti. Reconócete tal como eres, descubre la belleza que vive en ti, descubre las cualidades que son parte de ti y que te hacen únicos.
Si te reconoces, te aceptar y te validas, podrás romper el esquema, podrás permitir que las cosas que haces tengan sentido, que en lugar de sentir que cometes muchos errores porque no actúas como los demás, están encontrando tus propios caminos, estas haciendo las cosas de una manera diferente.
El final aún no ha llegado, todos los días tenemos la posibilidad de descubrir nuevas alternativas, no es preciso seguir los senderos que otros han recorrido para ser feliz, para ser exitosos o para estar bien, en cada uno de nosotros hay posibilidades especiales, explóralas. Si te animas a ser simplemente quien eres, tendrás la aprobación de la persona más importante y especial en tu vida " tu mismo"
Si otra persona ocupa ese lugar en este momento, reubícalo. La historia empieza y termina en ti, todos los demás están ahí para acompañarte no para aprobarte o aceptarte...eso solo lo puedes hacer "tu"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario