Cada día tienes la oportunidad de recorrer nuevos caminos, de vivir nuevas experiencias. No importa que tanta prisa tengas, siempre es posible incluir un toque de aventura.
Las personas que permanecen en lo seguro, que solo aprovechan lo que la vida les da, sin hacer ningún esfuerzo adicional, pueden tener una vida bajo control. Un día como siempre ocurre algo se saldrá de ese maravilloso esquema que hemos construido y tendremos frente a nosotros la oportunidad de vivir las aventuras que la vida ha esta reservando para nosotros.
A veces ese malestar que nos saca de nuestro "maravilloso control" construido de rutinas idénticas, de no exponernos y de seguir rígidos patrones. Es la oportunidad que nuestra alma sabe que necesitamos para vivir, para vibrar, para dejar salir todo esa luz que esta comprimida y reprimida dentro de nosotros.
Si nos arriesgamos y dejamos pasar el miedo, cada día estaremos más confiados y fuertes. Entonces los días que una vez fueron rutinarios e iguales tomaran un nuevo brillo y color. Empezaremos a ver como nuestra luz se expande y donde no nos acercamos porque creíamos que solo había sombras veremos con claridad la luz.
La vida es una aventura que vale la pena vivir. Todos los días conozco aventureros que aceptan el reto y otros que se dejan arropar por la rutina y por el miedo. Para todos deseo lo mejor. Es igualmente difícil quedarnos que arriesgarnos a emprender el viaje. Solo quien se arriesga sabrá la diferencia.
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